2008/11/26

Juan Salvador Gaviota

No gasto barba desaliñada,
no peino trencitas Bob Marley,
no visto camisetas del Che,
no fumo maría,
no pertenezco al movimiento okupa.

Y a pesar de ello, empiezo a considerarme:
un outsider,
un revolucionario,
un acrata.

Tal vez siga siendo el mismo:
salva patrias,
Ralph Hinkley,
capitán justiciero

O es simplemente:
Inmadurez?
Rebeldía?
Inconformismo?

4 comentarios:

juan mari dijo...

Esta es una prueba para ver si puedo conectar

Peregrino dijo...

pues sí que puedes

Peregrino dijo...

No hace falta ser un descerebrado para disentir con la realidad que nos rodea. Pero como me recordó ayer un buen amigo, esta es la que nos ha tocado vivir, y sobre la que se nos pedirán responsabilidades. así que a bregar!

juan mari dijo...

La respuesta a tu comentario y preguntas aparece en una página del NT. Dios estaba harto de tanto macarra, egoista y mediocre como pululaba por su mundo y amenazó con acabar con todos. Moisés le preguntó si la existencia de diez justos cambiaría su parecer y contestó que sí. Este es el tema. No se consigue nada con llorar sobre la leche derramada sino con la decisión de ser uno de los justos y esforzarse por conseguir un mundo mejor. Dedicamos tanto tiempo a bobadas, lo completamos con críticas y nos queda poco tiempo para con nuestra familia, amigos y afines conseguir un espacio de paz, justicia, solidaridad y alegría compartida.